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Terapia de Pareja
No importa cuántos años llevemos con alguien, ni cuánto nos queramos. Nadie está exento de tener problemas de pareja a lo largo de una relación: Rutina, falta de confianza, infidelidades, problemas de comunicación o malestar en la convivencia, son junto a muchas otras las razones principales de acudir a una consulta.
Iniciar una Terapia de Pareja no debería ser el recurso final ya que cuanto más tiempo se mantengan las dinámicas negativas, más complicado será reconducirlas.
Desde el principio os puede ayudar en múltiples aspectos:
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Saber ponerse en el lugar del otro
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Adquirir herramientas para mejorar la comunicación
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Mejorar la capacidad de escucha
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Dejar de haceros daño
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Aprender a solucionar conflictos
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Detectar patrones negativos
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Entender las necesidades del otro
Una terapia de pareja no sólo funciona para reconducir una relación, sino también para tener una ruptura lo menos conflictiva y dolorosa posible.